Tras las amenazas de muerte contra funcionarios ocurridas el martes por la noche en el Servicio de Alta Resolutividad (SAR) Norte autoridades locales encabezadas por el alcalde Esteban Krause brindaron su apoyo a los trabajadores del recinto y anunciaron acciones legales de parte de la Municipalidad de Los Ángeles contra quienes resulten responsables de estos graves hechos.
En dependencias del establecimiento afectado el jefe comunal se reunió por casi 2 horas con el director del Servicio de Salud Biobío, Walter Alvial; la directora comunal de Salud de Los Ángeles, Marta Aravena; la directora del CESFAM Norte, Roxana Morales; representantes de la delegación presidencial provincial y estamentos del SAR, repudiando lo acaecido y reiterando la necesidad de que se dispongan los recursos y se determinen las acciones necesarias para frenar la creciente ola de violencia constatada en los recintos asistenciales, a nivel país.
“Este SAR atiende 24 horas, es decir, hay un número importante de personas que trabajan día a día aquí y que requieren y que merecen tener seguridad. Hoy día eso ha sido vulnerado y nosotros, como municipalidad, vamos a ir por 2 caminos. Uno de esos caminos es cómo, conversando con los funcionarios, pidiendo ayuda de expertos, ver cómo podemos ir generando más condiciones dentro del establecimiento que permitan que nuestros funcionarios y funcionarias se sientan más seguros. Y lo otro, estamos redactando una petición al Ministerio Público, a los tribunales, a objeto de que esta situación que se vivió ayer sea absolutamente castigada a través de los tribunales y que sea, obviamente, una medida, una señal de que estas cosas no pueden pasar en el servicio público”.
El director del Servicio de Salud Biobío añadió que “lo primero es que nosotros venimos trabajando hace ya un tiempo en las mesas de seguridad para brindar mayor protección a la población y, principalmente, a los funcionarios que se exponen a situaciones de violencia. Actualmente, nosotros vinimos a evaluar que los protocolos se cumplan, dar la continuidad de la atención porque la atención de urgencia es fundamental para la comunidad -la que brinda este SAR- y, sobre todo, proteger a quienes dan vida a este SAR que son los funcionarios y que, a toda prueba, han dado continuidad al proceso de atención a pesar de las circunstancias que los ponen en riesgo”.
Finalmente, la directora comunal de Salud indicó que “nos preocupa demasiado el aumento de los hechos de violencia en la comuna. La inseguridad a la que están expuestos nuestros funcionarios y los usuarios son hechos relevantes y que tenemos que visibilizar y no normalizar; por lo tanto, estamos también aquí para ver qué medidas vamos a tomar con respecto a esta situación. El alcalde ya les anunció que vamos a seguir por la vía legal, vamos a pedir una medida de protección para este establecimiento, como también hacer las demandas contra quienes puedan resultar responsables de este hecho, porque hay amenazas de muertes involucradas”.
HECHOS REPETITIVOS
Como se informó preliminarmente, este último hecho contra funcionarios y usuarios de un servicio de urgencia primaria de la comuna ocurrió el martes, alrededor de las 20:30 horas, cuando una persona herida de bala ingresó al recinto en compañía de 2 sujetos, tras arribar en un vehículo particular. Inicialmente, el individuo intentó extraer un arma de fuego, lo cual no pudo concretar debido al estado que presentaba, siendo trasladado en silla de ruedas al interior del SAR.
Debido a la naturaleza de sus lesiones, y cumpliendo con los protocolos existentes, se avisó a Carabineros y a la Dirección de Seguridad Municipal, ante lo cual el herido reaccionó de manera violenta amenazando de muerte a los funcionarios y provocando un gran temor entre los casi 40 pacientes que había en ese momento, 10 de ellos pediátricos.
Carabineros, que andaba en búsqueda de un grupo de sospechosos por un asalto ocurrido minutos antes en Villa Galilea, llegó al SAR con un contingente importante de personal policial, trasladando bajo custodia al sujeto al complejo asistencial “Dr. Víctor Ríos Ruiz”, en calidad de detenido.
En paralelo, para preservar la seguridad de los trabajadores y usuarios, el SAR debió restringir sus atenciones, focalizándolas sólo en los pacientes categorizados como C1 y C2 durante el transcurso de la noche, cerrando parcialmente sus puertas y reforzando la seguridad, retomando la atención normal al público a contar de las 8:00 horas del miércoles.
Este condenable acontecimiento se suma a otros similares contra dispositivos de salud ocurridos en Los Ángeles y Biobío en los últimos años, lo cual ha activado la preocupación de autoridades comunales, provinciales y regionales; la de los gremios de la salud y la de la comunidad en general.